viernes, noviembre 11, 2005

Giros

Es raro los giros que puede dar un día en cuanto a estado de ánimo, sensación con los demás o incluso con uno mismo. Sean reales o no, muchas veces tenemos sentimientos que quizá no sean lo mejor para avanzar en nuestra búsqueda del 8 tumbado.

Por ejemplo, la soledad. Supongo que es inherente al ser humano eso de sentirse como en medio de un desierto desierto :-); o la duda; o el fracaso... cuando lo que intentas parece no salir, o simplemente cuando tú no pareces válido para nada o para nadie.
¿Es una cuestión de actitud el cambiar eso? Plantearse pequeñas metas es una buena solución, pero a la vez las sensaciones están ahí por algo, ¿no?. Como el dolor es una defensa del cuerpo, la tristeza, la ira, son también manifestaciones de que algo va mal. Ahora, lo que hay que ver muy al detalle es si el problema está en uno, o en los demás. Suele estar en ambas partes, la verdad.
Quizá lo que siempre vuelve es insoluble. Quizá estemos abocados a dar vueltas alrededor de las mismas luces y las mismas sombras. Al fin y al cabo, somos lo mismo, aunque nos vayamos matizando con el tiempo.
¿No dejo esperanza? Sí, siempre queda la espera de la plenitud, que supongo que con autoejercicio, voluntad y visión real de las cosas se puede lograr. Hay que educarse, y aprender a mirar el mundo y a las personas en lo que son, y dar y esperar en consecuencia y, sobre todo, en justicia.
No sé, a veces me siento muy mezquina, muy egoísta y laxa, muy astuta, muy muy muy demagoga y sobre todo, muy seca por dentro.
Que nadie se alarme por este post. I'm ok. Lo de demagoga es cierto, esto quizá es un mero ejercicio teclil.

9 comentarios:

Anónimo dijo...

saludos

Sergio dijo...

¿Teclil?

Monstera Notand. dijo...

¿Teclarréica?

Monstera Notand. dijo...

¡Santa Tecla bendita, patrona de los internautas!

He estado pensando (por eso huele a quemado en el ciberespacio: mi falta de costumbre) desde que pusiste este post. Más que nada, a ver si podía decir algo más constructivo que lo que se me viene a la punta de los dedos, pero no ha habido suerte, así que ahí va.

Esa sensación de vacío es recurrente, y da igual lo que hagas con tu vida, todo lo que puedas hacer no es más que paliativo. De mis tiempos ingenieriles guardo una analogía: en nuestro gráfico de señal emocional, el "nivel de continua" está un poco bajo y, en cuanto nos descuidamos, ya estamos entrando en números negativos.

Lo único que podemos hacer es fortalernos, reunir herramientas psicológicas para, en cuanto notamos que entramos en temporada baja, procurar no caer en barrena hacia la depre.

También ayuda el desarrollar una cierta simpatía por la tristeza suave. Y llegar a encontrar la belleza en las cosas que no dependen de nada, que siempre van a estar ahí.

Creo que hemos nacido con una leve intolerancia hacia la vida real. Periódicamente se nos amontonan los anticuerpos, y ahí vamos en picado.

Es crónico. Hazte a la idea.

Muchos besos, y... ¿de verdad de verdad que en tu aventura en Yankilandia no hubo ocasión para el pecado? ¡Tontorrona!

Monstera Notand. dijo...

Fe de erratas de la perogrullada de ahí arriba: donde pone "fortalernos", la idiota de la autora quería poner "fortalecernos".

Anónimo dijo...

Totalmente de acuerdo, crónico y sin cura. Sólo posible la mejoría.
No había leído aún esto y llevaba yo dos días preguntándome si la sensación constante de tristeza, vacío, sin salida... la tiene todo el mundo o sólo la gente que de alguna forma se empeña en ser depre.

A veces tengo la sensación de nunca estar contenta con lo que tengo, de pedir y exigirme más... los últimos retos que dirigían mi vida desde hace un par de años, los he alcanzado y, con buena nota. Y aún así no siento felicidad, la inconformidad rebosa y el estar perdida e insegura y tender a la trsiteza parece reconfortar... ala vez que te hace parecer gilipollas por todo el tiempo q puede "perderse" a la semana con esos momentos, sin ser capaz realmente de disfrutar.

Lo mejor de todo, q dentro de unos meses, de unos años, cuando recuerde esta etapa, la recordaré como feliz.

Siete dijo...

Eso por descontado. También hay que pensar que esa insatisfacción es el motor para seguir buscando y queriendo cosas... Yo también creo que soy feliz, porque la felicidad no tiene por qué ser pura a mi modo de ver. No creo que sea un momento concreto, ni que sea inalcanzable, porque no tiene por qué ser perfecta.
En fin, cosas tecliles, sí Novalis. Es una palabra preciosa.
Y Gaviots, tú y yo ya hablaremos...
Besicos

Siete dijo...

Ah. y en yankilandia no hubo lugar para el pecado porque iba en familia, a pesar de todo, y eso sabes que me coarta especialmente... pero te aseguro que no me faltaron ganas, Monstera. No sé qué me pasa, que tengo un otoño-invierno muy primaveral. Vamos, que vi cosas interesantes. Demasiadas... cosas. Y me temo que me pasa lo mismo aquí. La juventud, que tenía que estallar por algún lado, tanto estoicismo no es bueno...
:-)
Tengo ganas de verte, guapa. Y no es por la primavera adelantada...

Sergio dijo...

Ey MT, yo tampoco paso por un buen momento emocional. Podríamos consolarnos mutuamente o ¿me consideras ya de la familia?