Mal à l'aise porque no veo tantas pelis como quisiera, ni encuentro tiempo para leer bien, ni a veces digo/hago todo lo que me nace, aunque la(s) idea(s) no se me vaya de la cabeza ni del estómago el nudo.
El curro, que absorbe tiempo como un murciélago sediento. Y el carácter, que me puede y me frena. Y que solemos ser tan idiotas que nos imaginamos que queremos solo lo que nos queda fuera del alcance de las manos.
Pero de todos modos, varias cosas.
- El vidente-camarero. Muy fuerte. La mayoría ya sabéis esa historia, pero es espeluznante (sí, espeluznante) cómo necesitamos palabras que nos orienten un poco, o que nos digan lo que ya sabemos o lo que nos gustaría saber. Acompañé a Sara y Vanessa, y fue una noche curiosa. Por cierto que el señor era un listo de mucho cuidado.
- Bilbao. Como dice elIntenso la verdad es que cuando vas por las calles del Norte ya no se nota tanto como antes esa tensión. Al final la gente normal lo que desea es calma, estar a gusto en su entorno y vivir lo más feliz posible. Luego están los políticos, los guerreros y los medios; que crean lo que les conviene crear y construyen barricadas a veces tan artificiales que es ridículo.
El sentido común es lo que debería inculcarse. Sentido común y espíritu crítico. Aunque eso te convierta en...
;-)
- Cosas en perspectiva. Summercase, visitilla a The Ensaimadas, preparar un Largo Etc, cambio de casa y miles y millones de cervecillas nocturnas.
Qué estrés.
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2 comentarios:
De nuestras mentes no tanto, fue una buena época y está ahí siempre; pero sí de su lugar de videncia. Quizá fuera una alucinación nuestra.
Y también se recuerdan aquellas apuestas que ni se ganaron ni se perdieron, y esas cervezas con un Palacio delante, y esas horas y horas encerrados en la casa de las paredes de colores y... y...
:-)
Un nudo en el estómago es lo peor que hay... sobretodo cuando has comido en un chino.
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